De chiquita, cuando me preguntaban qué quería ser cuando sea grande, yo respondía "actriz", y todos sonreían, quizás pensando "Qué dulce la nena, ya se le va a pasar...". Igual mis papás me mandaron a un par de tallercitos de Teatro, como para tenerme contenta.
A los 16, le dije a mi viejo que quería estudiar Actuación en serio. Y ahí se armó quilombo y me dieron un rotundo "No" como respuesta. Como en ese momento no podía afrontar los costos por mi cuenta, no me quedó otra que acatar esa negativa.
Mis sueños actorales quedaron guardados en un cajón de mi inconciente. Me dediqué a estudiar otra cosa, terminé la carrera, conseguí la licenciatura e hice feliz a mis padres.
Hoy refloto ese sueño. Hoy comienzo con mi carrera de Actuación, en un lugar en serio, donde yo me lo pago y nadie puede decirme que "No". Igual por suerte mis viejos están contentos. Creo que siguen sin tomarme en serio.
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