Sí, bueno... Había gente que ya estaba esperando y hasta reclamando un post de este estilo. Porque ya hace casi dos meses que mi amiga Caro se vino a vivir conmigo a casa y algunas personas estaban esperando que yo postee chimentos acerca de la convivencia.
En esta oportunidad, les voy a exponer cómo la fórmula
estoy dormida +
sentido práctico puede acarrear resultados engañosos.
Situémonos. Un día muy temprano a la mañana, antes de comenzar su jornada laboral, Carolina decide pegarse una ducha. Aparentemente, mientras se duchaba, observa que había
"demasiados frascos de shampoo en uso" para su gusto. Y lo resuelve. A su manera.
Más tarde, yo decido también ducharme y noto primeramente que había un envase de shampoo Pantene vacío en el tacho de basura del baño. "Qué raro", pensé, "si todavía le quedaba a este frasco". Bueno... Ducha. Momento del shampoo: agarro otro envase de Pantene y me lavo el pelo. Momento de la crema de enjuague: ¿Qué es esto? Consistencia extraña. Parece shampoo... mmmh, qué raro! Mejor agarro otro...
Cuando me termino de bañar, consulto:
- Caro, ¿qué pasó con el shampoo y la crema de enjuague?
- ¿Eh?
Le explico a mi amiga toda la situación. Allí comienza a entenderse y esclarecerse la cuestión.
Sí, había demasiados envases para su gusto. Y pensó que ambos (el de shampoo y el de crema de enjuague) eran de lo mismo, de shampoo. Y razonó: ¿por qué dos envases empezados? Unámoslos! Ahorremos espacio!
Y así fue como mi querida amiga Carolina fabricó su primer Dos En Uno.
Si quieren se las presto un rato. Es muy práctica esta chica.
Etiquetas: Porque sí