Bueno, son cosas que pasan. El año tiene 52 semanas pero yo elegí justo esta para enfermarme. Justo en la que se supone que
no podía enfermarme.
Me están pasando muchas cosas y sinceramente me siento sobrepasada. Como suelo decir: me saltó la térmica. O parafraseando a
Borizela:
"la señorita control ha perdido el control total de la situación".
Mucho stress en el laburo por un evento que tengo justo este viernes, ensayos, un casting, un curso que me mandan a hacer y una cantidad de etcéteras... Se me juntó de todo. Y apareció la fiebre. Luego la tos. Luego la congestión. Y ahora la fiebre aumentó. Y por ahora el diagnóstico es rinofaringitis, y espero que en eso se quede porque ya bastante me complica tener que quedarme en casa mañana y no ir a trabajar.
La cuestión es que quienes me conocen saben que hace tiempo vengo decayendo pero estos días estuve en picada. Y cuando esto me pasa, exploto, y cuando exploto, reparto para todos lados. Es decir: me sensibilizo mucho, estoy susceptible ante todo. Y siento que todo me ataca, y la única manera que conozco para defenderme es atacar también (y reconozco que está mal eso).
Por eso, a los que me soportan a mi lado día a día:
Perdón. Porque sé que estoy insoportable. Y a los que me leyeron en estos días y notaron raras o infrecuentes actitudes en mí: bueno, eso está, forma parte de mí. Lo que sí reconozco es que estoy hipersensible y que se me fue la mano con mi dureza en algunas palabras. Sé que se me sobredimensionó una situación que, en definitiva, debería haberme
resbalado. La verdad que no fue mi intención lastimar ni joderle la vida a nadie, sólo dije lo que pienso aunque a veces el momento de calentura me haga sobrepasarme. Quien quiera tomar esto como una disculpa, que lo haga. Y quien quiera seguir ofendido, está todo bien también. Yo los aprecio mucho a todos, a pesar de que a la mayoría de ustedes no los conozca, pero... convengamos que en este momento tengo problemas más serios que resolver en el mundo real como para hacerme mala sangre en el
mundo B, por algo que ni vale la pena.
Por eso, me voy a desenmarañar el quilombo que tengo en este momento en mi vida. Sé que saldré adelante, porque siempre pude. Sólo es cuestión de tiempo y de paciencia. Mi cuerpo me pidió frenar de esta forma, y estoy tratando de hacerle caso.
Quizás me ausente por unos días, o quizás no. Reconozco que consideré la idea de cerrar el blog, pero lo cierto es que quiero mucho a este espacio, y me hace bien, lo necesito. Así que, si llegara a ausentarme, no creo que sea por mucho tiempo.
Y con estas palabras no pretendo dar lástima ni conseguir comentarios que "me consuelen". Simplemente lo considero una muestra de respeto hacia quienes me leen y una forma de pedir disculpas a quienes quizás ofendí o lastimé.
Hasta pronto.Etiquetas: Avisos parroquiales