Querido Pedrito:
Hace apenas un ratito que llegué a casa luego de nuestro encuentro y ya te extraño. Te mando este mail para desearte las buenas noches, aunque seguramente ya estarás durmiendo, ya que se te notaba muy cansado (no parabas de bostezar, pobrecito!!).
Yo acá estoy, super contenta y emocionada porque la pasé muy bien con vos. Quería decirte que me encanta ser tu novia (porque bueno, ya salimos 3 veces... puedo considerarme tu novia, no?) y que espero que me vuelvas a llamar pronto así nos vemos. Sino, no importa, te llamo yo.
Me encantaría que en la próxima salida puedas conocer a mis amigas, que están ansiosas por verte. Quieren conocer a ese hombre que me hace tan feliz, no paro de hablarles de vos! Y sino podrías venirte a casa a almorzar el domingo y conocer a tus suegros (bueno, a mis papás, jajaja!).
Recién pensaba que me olvidé de preguntarte cuáles son tus sueños. Entre tanta charla y todo lo que te conté sobre mis perros, mis amigas, el club, el gimnasio, la facultad, mi casa y eso, me olvidé de preguntarte, qué tonta! Pero bueno, quizás me lo puedas responder por acá. Te cuento el mío: mi sueño es casarme de blanco! Sí, entrar a la iglesia con un coro que cante el Ave María, del brazo de mi papi y verte a vos esperándome en el altar! Sería hermoso, ¿no te parece? Y viviríamos en una casita en un barrio privado, con un jardín donde mis perros puedan correr, pileta y una cerca pintada de blanco. A mí me encantaría esperarte allí cada noche a que vos vuelvas de trabajar y prepararte una rica cena. Sé que quizás suene un poco apresurado, pero... estamos soñando, no? Además me encantaría tener tres hijos, en lo posible dos nenas y un varón. Los nombres ya los tengo elegidos, pero como todavía no me dijiste tu apellido no sé si pegarán. Bueno, habrá que ver, mi amor.
Ay, ya te extraño y no veo la hora de verte nuevamente y volver a decirte que te amo! Te noté sorprendido cuando te lo dije esta noche. Sos un dulce, te quedaste mudo! Debe ser de la alegría que te dio! Pero es así: siento que te amo, a pesar que hace tan poquito que nos conocemos, qué loco no?!
Bueno, mi amorcito, te mando el besito de las buenas noches. Soñá cosas lindas, soñá conmigo, que yo seguramente voy a soñar con vos! Nos vemos prontito, así que no me extrañes mucho eh! Y si me extrañás, llamame. A mí me encanta que me llamen todo el tiempo.
Besos, besos, miles de besos. Te amo, mi amor. Escribime. Llamame.
Tu Bebé
(o
"Esponjita", como siempre me apodaron cariñosamente todos mis ex novios)
Etiquetas: Cuentos