Salvo que sean de las buenas, claro. Y si el cover está bien hecho, es válido, ¿por qué no?
No sé, me resistía, no me gustan las bandas que simulan ser bandas... y menos si pretenden ser de las grossas. Pero surgió la posibilidad de ir y, apelando al
open your mind, fui.
El show que dieron anoche
The Australian Pink Floyd en el estadio Obras fue de una calidad tan pero tan alta, que ni siquiera hacía falta cerrar los ojos para creer que estabas viendo a Pink Floyd
dendeveras. Ojo. Antes que salten, aclaro: hablo de sonido, de música. Impecable, de principio a fin.
Nuevamente, gracias
Diego y
Baterflai por tan bonita velada, acompañada (como ya es costumbre) por buena música. Que sigan los éxitos!
Etiquetas: Música