Bueno, eso, volví a los claustros. Ayer me inscribí para estudiar nuevamente. Esta vez se trata de una carrera corta y en una universidad privada (porque ya estoy vieja y ya hice la licenciatura larga y luché seis años contra la burocracia de la UBA), así que el día ocho del ocho empiezo a cursar mis materias de la carrera de
Organización de Eventos y Espectáculos.
Todo tiene que ver con todo, y la elección de esta carrera, además de ser algo que me di cuenta que me gusta, se relaciona con la energía puesta en las posibilidades de un cambio vocacional y laboral. Las ganas están, ahora hay que seguir remando.
Digo: era ahora o nunca. Y es ahora!
Y pienso: qué loco sería si, por ejemplo, me toca tener a
Maga como docente.
Y no sé... digo... Espero que esta vez mis compañeritos sean copados y sean gente responsable y organizada para laburar. Por algo estudian algo que empieza con la palabra
Organización, ¿no? Porque la verdad que no tengo ganas de bancarme niñitos irresponsables.
Estoy insoportable. Será porque tengo fiebre.
Ibupirac y a seguir disfrutando de mi cama en este día tan asquerosamente lluvioso y frío.
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