¿Qué posibilidades hay de que la profecía de un amigo finalmente se cumpla casi casi igual a como me la planteó?
¿Qué posibilidades hay de desear fuertemente un cambio y que el viento sople a favor y los pasos se vayan cumpliendo?
¿Qué posibilidades hay de escuchar una frase tranquilizadora cuando el panorama se ve negro (o mejor dicho, comienza a dejar de verse)... pero por ahora hay que mantener la esperanza de que puede llegar a estar todo bien?
¿Qué posibilidades hay de imaginarse una situación ideal y que se cumpla exactamente como quería?
¿Qué posibilidades hay de sentirme segura de que he llegado a controlar algo que creía indomable?
¿Qué posibilidades hay de que te sorprendan ofreciéndote algo mejor de lo que pedías?
¿Qué posibilidades hay de seguir ligando cuando pensabas que la buena racha ya se había agotado?
Hoy por hoy, 100%.
Por primera vez siento que esta vez la suerte está un poquito de mi lado. Bastante, en realidad, pero tampoco queremos que se asuste y terminar ahuyentándola.
O quizás sea eso de que el
buen karma existe, y es tiempo de cosechas. O que hay una fuerza superior que escucha y, en algún momento, cumple. O que debería agachar mi cabeza y reconocer que la terapia me hace bien. O que quizás no soy tan débil como yo me veo a mí misma, y que cuando realmente
quiero, puedo luchar por cumplir mis sueños, concretar mis proyectos y alcanzar mis objetivos.
Etiquetas: Porque sí